En la película magistral norteamericana “Rembo” fue protagonizada por Sylvester Stallone. Pero sin un detalle importante, todo su protagonista sería destruido. Ya que el papel importantísimo en todas las partes de la película jugaron los cuchillos. Los cuchillos de Rembo. Dicen, que cada hombre de verdad tiene que tener un buen cuchillo, porque:
- - es un atributo de fuerza y hombradía de su propietario;
- - un símbolo singular del guerrero y cazador;
- - la pasión, que está en los genes de cada hombre.
Todos nosotros recordamos en sí aquel chico, que salía del cine con ojos brillantes de interés. En estos ojos se pudo ver el único sueño – ser como Rembo, un hombre arrojado, fuerte, al que todo el mundo tenía miedo y lo respetaba. ¡A veces parecía, que si tuvieras un cuchillo como él de Rembo, te sentirías participante de sus hazañerías! Y si ahora tiene de todo, entonces ¿Por qué no cumple su sueño de infancia? Para conseguir el reconocimiento de la sociedad y afinidad de mujeres guapas, no es obligatorio que tenga un alto estatus social, un montón de músculos o un aspecto de macho. Si hay algo que eleva al hombre en sus propios ojos y le da el derecho de tener orgullo de sí mismo, podemos decir que se ha convertido en una personalidad. ¡Y el sueño conquistado es algo perfecto para esto!
Con un cuchillo en las manos incluso un hombre de constitución media parece ser alto e invencible. Se despiertan en él los instintos de sus antecesores, que lo convierten en un caballero valiente, audaz y arriscado.
¡La verdad es que este cuchillo lo vieron decenas de millones de personas, y cada una de ellas por lo menos una vez en su vida, se imaginó que era su propietario! Es posible formar parte de la sociedad de los felices dueños del cuchillo más querido sin esperar, hasta que alguien se dé cuenta de resalárselo. ¡Hágase este regalo que merece la pena de verdad! Ya que él le servirá de ayuda tanto en la caza, como en la vida normal se convertirá en algo irreemplazable para Usted. ¡Aquel hombre que lo tuvo en sus manos por lo menos una sola vez, nunca querrá despedirse de él! A los hombres de verdad no les gusta hablar mucho. Prefieren actuar. Entonces, pida el cuchillo de Rembo ahora mismo.